Las mujeres de hoy nos enfrentamos a un gran dilema: ir a trabajar o cuidar de nuestras familias; tristemente nos llega siempre ese momento en el que nos vemos obligadas a volver al trabajo y nos hacemos la siguiente pregunta: ¿Con quién dejamos a nuestro bebé? Dejando de lado la culpa interna que sentimos por tener que salir de casa para proveer para el futuro de esa hermosa criaturita, la realidad es que no tenemos demasiadas opciones: La guardería, una niñera o si tienes mucha suerte, abuelos disponibles y con onda.
Antes que nada debes recordar que estás haciendo esto por tu pequeño, y por ende lo mejor para ti será lo mejor para el bebé, ellos necesitan vernos contentos aún cuando no estamos en casa. Entonces si algún familiar o abuelo te ofrece ayuda, que no te tiemble el pulso para decir que sí. Lo mejor para tu niño es estar rodeado de un ambiente familiar, caras conocidas, personas con experiencia que ya hayan criado niños, gente que el bebé conozca y quiera… ¿Y qué mejor para todo esto que un abuelo, una persona que por cierto te crió a ti? La única cuestión a tener en cuenta es el síndrome del abuelo cansado, algo que puede observarse en cualquier gran ciudad del mundo: abuelos luchando por hacer entrar el cochecito del bebé en el supermercado, abuelos yendo al médico con sus nietos, abuelos cocinando, cambiando pañales, llevando a los niños a sus actividades diarias, abuelos que hacen tanto que ya ni pueden cuidar de su vejez. Por eso es importante cuidar al abuelo y evitar que sea un empleado full time y niñero de fin de semana cuando papá y mamá quieren salir. Hay que tratar a los adultos mayores con responsabilidad y no fatigarlos, por eso, si el bebé queda con el abuelo deja todo listo para que la pasen super bien y el adulto no tenga que pensar en nada: mamaderas en la heladera, comidas listas, juguetes ordenados y accesibles, sugiere paseos y otras actividades, planea el día, para que ellos sientan que pueden hacer el mejor trabajo del mundo sin morir en el intento.
La segunda opción en este pequeño ranking personal es una niñera, alguien que vaya a tu hogar todos los días a la misma hora a cuidar del bebé. Se que para las mamás es muy difícil pensar en dejar a un extraño en el hogar, pero si no hay familia disponible, es importante contratar a la niñera 3 meses antes de volver al trabajo para verla en acción, decidir si es la persona adecuada y permitirle generar un vínculo con el bebé. Si eres una madre obsesiva como yo y quieres seguir apañando a tu bebé aún cuando no está en tus brazos organízale a la niñera una rutina diaria que ayude a tu bebé: pauta una agenda de horarios, comidas, paseos y juegos, deja las comidas listas para asegurarte de que coman lo que tu haz preparado, deja preparados los juegos favoritos de tu bebé, y prepara una rutina de al menos 40 minutos al aire libre para ellos. No pretendas que la niñera haga todo porque tienen que concentrarse en cuidar al bebé y no puede andar distraída haciendo cenas, almuerzos o paseando al perro.
La última opción es la guardería, tranquila, si es la única opción que te queda, no te preocupes, es un mal necesario que de malo no tiene nada. Es un mito que los niños que van a la guardería se enferman más, todos se pescan algún resfrío en invierno inclusive el que se queda escondido bajo la teta de mamá. Lo único que debes hacer antes de elegir el lugar es realizar una investigación exhaustiva para determinar qué guardería va más con el estilo de vida tuyo y de tu bebé. Primera cuestión a tener en cuenta UBICACIÓN (¿queda cerca de casa o cerca del trabajo? ¿si tengo que ir corriendo a buscar al niño llego fácil?); segundo tema HORARIOS (¿Tienen un horario rígido o puedo dejar al niño y retirarlo a cualquier hora?); tercero INFRAESTRUCTURA (¿El lugar cuenta con todo lo adecuado para los pequeños y es seguro? ¿Tiene ventilación, luz natural, espacio de juegos, espacio higiénico?); y finalmente lo más importante RECURSO HUMANO (¿Está capacitado el personal que cuida a los niños? ¿Me gustan las maestras?). Si combinas estos cuatro puntos con tus propias preguntas entonces te va a ser mucho más fácil elegir la guardería adecuada para tu bebé, a pesar de que, como en la vida, sea difícil encontrar el combo perfecto.
Y recuerda siempre antes de salir de casa, no estás abandonando a tu bebé, sólo vives en el siglo XXI y necesitas salir a trabajar para cubrir todas sus necesidades; pero ir a trabajar sabiendo que nuestros hijos están en buenas manos hace toda la diferencia.
Excelente articulo!!!
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